
Y pese a que la solución permitirá el inmediato desalojo de las familias ocupantes en Villa Soldati, el problema de fondo no está resuelto: el acceso a una vivienda digna y propia es el reclamo eternos de la clase baja y media de toda la Argentina. Sin acceso al crédito ni capacidad de ahorro, más un Estado que no da soluciones de fondo al tema, el estado ideal todavía es lejano, muy lejano.
Por lo pronto, en Villa Soldati los ocupantes lograron lo cometido: ocupación a cambio de viviendas. Pero bajo una condición: abandono inmediato de los terrenos o desalojo y represión.