El gobernador bonaerense Daniel Scioli, como el Jefe de Gobierno Mauricio Macri, reclamaron el apoyo de la gente para controlar más la inseguridad y tomas decisiones de peso.
Lo claro, entonces, es que ningún político de referencia en el país tiene la solución. Si un gobernador o un intendente reclama apoyo se transforma en un ciudadano más. Lo que se necesita es una política de largo plazo con educación y asistencia y, en lo inmediato, acciones más fuertes para evitar tantos hechos violentos.
Pero existe una diferencia. La clase política goza de una protección extra la cual los aleja de la realidad. Pequeño gran detalle.