Buenos Aires, la ciudad subtropical

La memoria no falla. Hace muchos años, en la escuela secundaria tenía un profesor en la materia de Geografía que habitualmente era cargado, no se le prestaba atención e, incluso, se suponía que su personalidad era algo “rara”. Por más que pocos puedan definir qué es “raro”, es profesor un día, durante una tarde, en una hora de clase, dijo algo que nunca más se escaparía de mi cabeza: “Argentina se va a transformar, cuando sean grandes, en un país subtropical. Y muchos años después, en uno tropical”.

Casi 20 años después, Argentina viviría los cambios en el clima que jamás hubiera pensado, como sequías extremas en zonas húmedas, precipitaciones e inundaciones en regiones áridas, nevadas en sitios imposibles, y picos de calor con temperaturas extremas de hasta 40 grados.

Así es como tomo conciencia que el cambio climático es un hecho, aunque en rigor de verdad, como somos todos los humanos, nunca tomaremos conciencia hasta tanto no ver con vuestros propios ojos un huracán en la puerta de casa.

Hace días que Buenos Aires sufre jornadas de temperaturas extremas, superiores a los 34 grados. No hay mucho por hacer por lo pasado, pero si por el futuro. A este paso, Argentina se convertirá en un país tropical como Brasil o el Caribe, porque subtropical ya lo es. Me lo dijo un profesor de Geografía…