Desde que se ejecutó el operativo que finalizó con la muerte de Osama Bin Laden, todo el mundo y los medios de comunicación exigen que se publique, al menos, una fotografía que demuestre la desaparición del mayor terrorista del mundo. Sin embargo, dos cuestiones.
Por un lado, Obama decidió no mostrar imágenes del cadáver, con lo cual la gran masa de audiencia mundial no podrá confirmar la veracidad del hecho. Por otro, no mostrar una imagen del maltrecho Bin Laden, colaboraría en no tentar a los musulmanes a realizar atentados alrededor del mundo.
Sin embargo, ronda en el ambiente varias dudas y, desde ahora, serán muchas más. ¿Cómo quedó Osama Bin Laden?¿Lo torturaron?¿Lo acribillaron a balazos? ¿Está vivo?Todas las respuestas, por ahora, inconclusas.