Brasil sufre una de las peores tragedias naturales de su historia debido a la gran cantidad de lluvias, inundaciones y aludes que causaron la muerte de al menos 650 personas, aunque la cifra al final de los rescates podría superar las 1000 personas.
Por el momento, las lluvias han cesado en Río de Janeiro pero siete ciudades cariocas se encuentran devastadas y en estado de "calamidad pública".
La situación supera todos los pronósticos y pone en duda uno de los eventos más importantes de todo Brasil: el carnaval deRío de Janeiro, pues esta ciudad vive la peor tragedia de su historia.
La nueva presidenta Dilma Rousseff ya se encuentra trabajando a apenas días de asumir su cargo. Destinó toda la ayuda posible pero parece que nada alcanza.