Oriente Medio es sin dudas la región más conflictiva del momento, ya sea por cuestiones religiosas, étnicas, políticas o sociales. Pero más allá de la eterna crisis que vive la región, llama la atención cómo a lo largo de las últimas semanas fueron cayendo varios gobiernos, como lo son Egipto, Siria, Jordania, Kuwait o Libia.
En todo ellos hay graves conflictos con dimisión de gobierno incluido. La región, claro está, es rica en petróleo pero totalmente pobre en miseria y desigualdad. Analistas internacionales creen que la caída institucional de sus gobiernos no tiene por qué crear una crisis financiera global.
Podría se posible, pero sin dudas que algo está pasando en Oriente Medio.
