Un frío glacial y nieve paralizaron los aeropuertos en Gran Bretaña, causaron el cierre de 7.000 escuelas y rutas británicas y sumergido a Francia y Suiza en el caos junto con Irlanda. Todo eso es lo que produjo, al menos, el frío. El aeropuerto de Gatwick, en Gran Bretaña, lleva 72 horas cerrado por la nieve.
Docenas de vuelos se han cancelado en los aeropuertos parisinos y el norte de Europa por el temporal de nieve. En Ginebra, el aeropuerto fue clausurado por 36 horas y había un metro de nieve en la pista después de una tormenta la noche del martes. El servicio de tren Eurostar, que une a Francia con Gran Bretaña, fue afectado en un 50 por ciento por el temporal en la región de Kent, en Gran Bretaña.
Los muertos se siguen acumulando y los más ancianos hacen memoria qué día de sus vidas el clima se transformó en una seria amenaza de muerte. En Gran Bretaña, por ejemplo, los servicios de emergencia recomendaron no salir a la calle si no es estrictamente necesario.
Toda semejanza con la ficción, es pura realidad.
