Automóviles, puentes, viviendas y 4 personas. Eso es lo que se llevó por delante el accidente ambiental más grave en la historia del país, producto de un derrame tóxico de una compañía dedicada a la producción de aluminio.
El vertido, que estaba contenido en un dique, se originó el lunes pasado por la rotura de esta represa, provocando la fuga de metales pesados hacia varias localidades.
El vertido, que estaba contenido en un dique, se originó el lunes pasado por la rotura de esta represa, provocando la fuga de metales pesados hacia varias localidades.
El primer ministro húngaro, Víktor Orban, ha atribuido el desastre a un posible error humano, y ha decretado el estado de emergencia debido a que la avalancha de lodo amenaza con llegar hasta el Danubio, el segundo río más largo de Europa y que atraviesa 10 países.
Además, cientos de policías y soldados han sido desplegados para evacuar a los habitantes y desde varios helicópteros se arroja yeso en las corrientes de esta sustancia, con el fin de evitar una contaminación del agua potable.
El Licenciado Alfonso Giudici, Presidente del Consejo Superior de Geología de la Argentina, explicó que los llamados lodos rojos ¨son un residuo originado en el tratamiento de bauxita, mineral con hierro y aluminio, y si bien su toxicidad reside en componentes como la arcilla, limos, oxidos de hierro y oxidos de luminio, aún en ese supuesto la afectacion a cursos de agua estarán dadas como un minimo por aumento de la turbidez¨.
Según el experto, se trata de un vertido altamente tóxico y corrosivo, ya que provoca graves quemaduras en la piel, en gran medida por la presencia de soda caústica, usada en el proceso para controlar la acidez.
Por su parte, la portavoz de la Unidad Nacional de Desastres (NDU), Gyorgyi Tottos, descartó la posibilidad de que haya radiación en la zona y afirmó que “la toxicidad del barro se atenúa por cada kilómetro que se extienda”.
Sin embargo, la organización ecologista Greenpeace advirtió que el impacto de este desastre podría ser mucho peor que el vertido de cianuro ocurrido hace 10 años en Rumania, donde las aguas contaminadas de una mina de oro afectaron los ríos Danubio y Tisza.
Costo ambiental
El gobierno de Hungría estimó que la limpieza tardará al menos un año y costará miles de millones de dólares, entre los que se incluye una indemización a las víctimas de la tragedia, calculadas en unos 7000, con 6 personas que aún se encuentran desaparecidas.