
De un lado, representantes de las clases sociales más bajas en reclamo de vivienda digna. Del otro, las fuerzas de seguridad que deben responder a la autoridad. Luego de los desalojos, la violencia, los dos muertos y los heridos, los ocupantes decidieron volver a ocupar parte del parque público.
El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, ya aseguró que no claudicará y evitará la ocupación ilegal de tierras. Sólo podría haber una solución al conflicto, y es muy sencilla: destinar fondos, hacer obras e inaugurar viviendas. Sólo así se hubieran evitados los dos muertos y los heridos de bala.