
Desde la edición Italia 90, la calidad de los mundiales ha ido en baja, con niveles futbolísticos muy pobres pero con la motivación de semejante competencia. Sólo unos pocos países apuestan al fútbol y no al ejercicio físico, pero cada vez es más difícil ofrecer un espectáculo entretenido.
Jugadores como Kaká, Cristiano Ronaldo o Messi intentarán aportar la magia que el fútbol necesita. Realizar la copa del mundo en África no fue un simple reconocimiento al continente más pobre, sino por una cuestión de negocios de la FIFA de expandir el show a todos el globo, como lo hizo en el apetecible mercado asiático con Korea-Japón 2002.
Vale recordar que la sede, Sudáfrica, es el escenario de la recordada lucha del líder Nelson Mandela, quien estuvo más de 20 años preso por resistirse ante el Apartheid, el régimen de segregación y dominio de la minoría blanca ante la mayoría negra en Sudáfrica.
Por la lucha de Nelson Mandela, hoy de 91 años, y un espectáculo que reúne al mundo, bienvenidos al Mundial Sudáfrica 2010.