A casi un año de un hecho de inseguridad que, entre tantos otros, llamó la atención de la opinión pública por la voracidad del hecho, la vida al menos ofrece un segunda oportunidad para que, sin olvidar lo pasado, se puede apostar a futuro.
Pasaron casi 365 días desde que un día, Carolina Píparo salía del banco y fue víctima de una salidera bancaria que finalizó trágicamente: le robaron todo el dinero y la balearon en la panza, estando embarazada. El final fue trágico: su bebé de varios meses en la panza murió. Ella, sobrevivió.
Hoy, su entorno familiar confirmó que Carolina está embarazada. Nadie ni ella olvidará su hijo Isidro, que la cuida desde algún lugar, con la felicidad de que la vida ofrece más oportunidades para volver a sonreir.
