Tras permanecer 9 horas secuestrado en el hospital policial, el presidente Rafael Correa fue liberado sano y salvo por tropas de elite de las Fuerzas Armadas, tras un intenso tiroteo con los policías sublevados.
Dos camiones de militares llegaron a los alrededores del nosocomio y comenzaron a disparar, mientras los policías rebeldes contestaron con bombas lacrimógenas. Sin embargo, el mandatario logró ser evacuado con máscaras antigas y en silla de ruedas.
Minutos después de la balacera, Correa habló ante una multitud desde la Casa de Gobierno y acusó a su antecesor en el cargo, el opositor Lucio Gutierrez, de estar detrás del golpe de estado.
"No fue la Policía. Pronto se descubrieron los verdaderos motivos de quién estaba detrás de esto... los verdaderos motivos. Era Lucio Gutiérrez, eran los miserables de la oposición"
Pese a ello, el ex jefe de estado -quien se encuentra en Brasil- rechazó las acusaciones y dijo que es el propio Correa el culpable de la crisis, ¨por tener un gobierno corrupto y que no respeta los derechos¨.
De todas formas, la Fiscalía Ecuatoriana ya tomó cartas en el asunto y citó a Gutierrez a declarar por presunta tentativa de asesinato, ya que lo considera sospechoso de conspirar contra el presidente en ejercicio. De hecho, en el inicio de la crisis había pedido disolver el Parlamento y llamar a elecciones anticipadas.
Purga policial
Ya más tranquilo y en cadena nacional, Rafael Correa anunció la depuración de la Policía, ¨que no obedeció a una supuesta supresión de beneficios económicos a efectivos de la fuerza pública, sino a una conspiración¨ que se fraguó para apartarle del poder.
Asimismo, aseguró que la polémica ley que originó la protesta ¨no va a ser revocada¨ y que ¨No habrá perdón ni olvido¨ para los que participaron de la revuelta.
La calma comienza a aparecer
Reestablecido el presidente en sus funciones, el alcalde de Quito, Augusto Barrera, informó que el aeropuerto internacional Mariscal Sucre, también reinició sus actividades luego de horas de estar suspendidas sus operaciones. Más de 150 efectivos de la Fuerza Aerea Ecuatoriana lo habían paralizado en ¨solidaridad¨ con el pedido de los policías rebeldes.
No obstante, la aerolínea Lan Chile anunció la suspensión de vuelos a esta capital, debido a que ¨por la crisis social, no se ha garantizado el proceso de chequeo a los pasajeros¨.
Reunión de Unasur en Buenos Aires
Citados al palacio San Martín, varios presidentes y cancilleres de la región viajaron urgente a esta ciudad a fin de debatir la crisis ecuatoriana.
El primero en llegar fue el uruguayo ¨Pepe¨ Mujica, a quien le siguió el presidente de Bolivia Evo Morales. El mandatario cocalero propuso ni bien arribó trasladar a todos los jefes de estado hacia Ecuador, en apoyo a Rafael Correa.
En el mismo sentido se pronunció Alan García, de Perú, que propuso -en caso de ser necesario- una base en su país y a 15 km de Guayaquil.
Por su parte, Lula Da Silva y Fernando Lugo enviaron delegaciones diplomáticas, debido a que el cierre de campaña brasileño y el estado de salud del paraguayo respectivamente les impide viajar a la Argentina.