La movilización que se había programado para la tarde de ayer podía prever nuevos incidentes, y es que los vecinos de los barrios de edificios cercanos se reunieron para reclamar por una rápida solución a la toma de terrenos y que les aseguren que no se instalará una nueva villa.
Los ánimos y tensiones finalizaron en un nuevo enfrentamiento. Los vecinos que comenzaron los incidentes intentaron que no se registraran imágenes, pero la Justicia ya analiza visualizar lo grabado para detectar a los incitadores a la violencia.
Por el momento, las hectáreas del Indoamericano siguen ocupadas. Sólo un plan de viviendas firme y concreto determinaría el cese de la ocupación. Mientras tanto, los vecinos de la zona se tornan cada vez más impacientes... y violentos.